TODOS SOMBOS RIO BLANCO es una convergencia de organizaciones, colectivos y personas, cuyo punto de coincidencia es el rechazo al atentado ambiental y al desconocimiento de de los derechos colectivos de los habitantes de Manizales, que se configuran con la construcción del Proyecto Tierra Viva Biociudadela, en el lindero del área protegida Reserva Forestal Río Blanco.
Tal proyecto contradice evidentemente el CONVENIO SOBRE LA DIVERSIDAD BIOLÓGICA firmado y ratificado por Colombia con la Ley 165 de 1994, en el que se ordena promover un “desarrollo ambientalmente adecuado y sostenible en zonas adyacentes a áreas protegidas”, e ignorando el artículo 31 del Decreto 2372 de 2010, en el que se manda que “El ordenamiento territorial de la superficie de territorio circunvecina y colindante a las áreas protegidas deberá cumplir una función amortiguadora que permita mitigar los impactos negativos que las acciones humanas puedan causar sobre dichas áreas. El ordenamiento territorial que se adopte por los municipios para estas zonas deberá orientarse a atenuar y prevenir las perturbaciones sobre las áreas protegidas, contribuir a subsanar alteraciones que se presenten por efecto de las presiones en dichas áreas, armonizar la ocupación y transformación del territorio con los objetivos de conservación de las áreas protegidas y aportar a la conservación de los elementos biofísicos, los elementos y valores culturales, los servicios ambientales y los procesos ecológicos relacionados con las áreas protegidas.”
La Reserva Forestal queda expuesta a la presión directa de aproximadamente 12.000 habitantes que ocuparan la urbanización paradójicamente denominada Tierra Viva Biociudadela, sin más separación que una cerca de alambre, por lo que necesariamente se convertirá en depósito de basuras, sitio de tránsito y, sobre todo, punto de avanzada de nuevas urbanizaciones, como se puede corroborar con la paulatina destrucción de Monte León, para citar un solo ejemplo.
Además de la amenaza sobre la invaluable fauna y flora, también queda en riesgo, en el mediano plazo, la fuente del 35% del agua que consumen los habitantes de Manizales, ante las presiones urbanizadoras. Esto sin extendernos en la carga de aguas servidas que se verterá por un alcantarillado construido hace varias décadas y para exigencias mucho menores, lo cual producirá necesariamente nuevos perjuicios.
Con proyectos como éste, prosigue la errada política de expandir la ciudad, no en función de las necesidades de los habitantes, sino de favorecer la especulación con el suelo rural cuando es declarado urbano, maniobra legal mediante la cual unos cuantos negociantes se apropian del mayor valor que súbitamente adquieren los predios y se benefician de las obras viales y de conexión a los servicios públicos de la nuevas urbanizaciones, gasto que recae sobre el erario público.
Las políticas, que eliminan los espacios verdes, invaden espacios naturales, siembran riesgos y concentran población, son las que han conducido a que ciudades como Medellín lleguen a alarmantes niveles de contaminación, al eliminar la vegetación que cumple la función de absorber el CO2, además de arrasar de paso el paisaje y las fuentes de agua; son las que han generado que Bogotá sufra crisis con su alcantarillado e inundaciones, e incurra en enormes costos para trasladar el agua potable a los habitantes de los sitos altos, y son una de las causas del sinnúmero de desastres que sufren las ciudades.
SOMOS TODOS RIO BLANCO no se opone al desarrollo de la ciudad y la construcción de viviendas, siempre y cuando haya una debida planificación, y propone como alternativas para quienes han invertido recursos en este proyecto, que, en uso de las atribuciones legales, la administración municipal, les permita llevarlo a cabo en la Comuna San José, donde el fracasado proyecto de Renovación dejó varios lotes disponibles.
Es deber del Ministerio del Ambiente, de la Alcaldía de Manizales y de Corpocaldas, cumplir el Convenio, la ley y el Decreto Reglamentario, delimitando una adecuada área de amortiguación de la Reserva Rio Blanco, y, por consiguiente, suspender la realización del Proyecto.
Convocamos a todos los habitantes de Manizales, en especial a la Academia y a los jóvenes a hacer suyo el lema TODOS SOMOS RIO BLANCO, expresando su rechazo al proyecto urbanístico mediante todas las formas de protesta y movilización civilizadas.
Centro de Estudios y Gestión de Derechos para la Justicia Ambiental
Colectivo Kumanday
Manizales En Común
Veeduría Interdisciplinaria de Caldas
Colectivo Subámonos al Bus del POT
Universidad de la Tierra-UNITIERRA
Natural Seeds Alliance
Centro de Estudios para el trabajo-CEDETRABAJO
Planeta Paz
Amigos del Jardín Botánico
Comité de Unidad y Solidaridad-CUT-CTC
Semillero Pensando Lo Público
Comité de Unidad y Solidaridad